10 Animales Que Se Drogan

Animales que consumen drogas: de la naturaleza al delirio

Al pensar en drogas, solemos asociar su consumo únicamente con los seres humanos. Sin embargo, la naturaleza esconde secretos sorprendentes en los cuales algunos animales también buscan tener sensaciones distintas a través de ciertas sustancias que les ofrece su entorno. En este artículo, vamos a descubrir algunas de las criaturas más curiosas que se dedican a este tipo de comportamiento.

Murciélagos

Comenzamos con los murciélagos, quienes han aprendido a sacarle provecho a la fermentación de los azúcares de las frutas, que da como resultado la formación de alcohol. Estos inteligentes mamíferos permiten que las frutas se pudran para conseguir un estado de embriaguez total. Curiosamente, la borrachera no parece afectar su capacidad de vuelo, pero tomar precauciones y no conducir bajo los efectos del alcohol es siempre una buena idea, incluso para los murciélagos.

Walabis

En Australia, los walabis, una especie de canguro enano, tienen la suerte de habitar cerca de campos legales de plantaciones de marihuana que son cultivadas por farmacéuticas. Estos curiosos animales se las arreglan para arrasar con estas plantaciones y después, en un estado de éxtasis, realizan unos extraños círculos en los campos de maíz, que bien podrían parecer obra de alienígenas.

Caballos

Es posible que nunca hayas imaginado que uno de los animales más dóciles y antiguos compañeros del ser humano también sea un fiestero. En Norteamérica, los caballos consumen plantas que contienen suasonina, un alcaloide con efectos muy parecidos a la marihuana. Parece que nuestros amigos equinos conocen bien cómo disfrutar de la naturaleza.

Musaraña

Las musarañas comparten con los murciélagos el gusto por la fermentación. Sin embargo, estos roedores son un poco más exigentes y trepan a las palmeras para obtener el vino de palma, que contiene cerca de un 4% de alcohol. Imaginamos que subir debe ser fácil, pero bajar puede ser todo un desafío.

Carneros

En las altas montañas rocosas de Canadá crece una especie muy rara de líquenes. Los carneros han descubierto las propiedades psicotrópicas de estas plantas y frotan sus dientes contra las rocas para sumergirse en un viaje alucinógeno más propio de un festival de Woodstock que de un rebaño de ovejas.

Moscas

El consumo de alcohol para ahogar penas no es solo cosa de humanos. Según un estudio, las moscas macho, después de ser rechazadas por las hembras, encuentran consuelo en el alcohol que producen las frutas. Sorprendentemente, las moscas que han logrado copular se alimentan de las frutas que no contienen alcohol. Parece que hasta en el mundo de los insectos hay reglas sociales.

Jaguares

El jaguar centroamericano, un felino carnívoro, busca en las selvas una planta llamada Banisteriopsis capi y mordisquea sus hojas hasta entrar en un estado de alucinación. Curiosamente, los indígenas de la región elaboran una bebida a partir de estas hojas para conseguir el mismo efecto. Parece que las plantas alucinógenas son atractivas tanto para humanos como para felinos.

Monos vervet

Los monos vervet se embriagan por completo y bajan de los árboles para robar los cócteles de los turistas en las playas de la isla caribeña de San Quint. Parece que tienen una predilección por los cócteles que llevan ron, quizás porque les recuerda el sabor de la caña de azúcar. ¿Sabías que aproximadamente el 5% de estos monos son alcohólicos? Curiosamente, ese porcentaje coincide con el de humanos que también lo son.

Renos

¿Alguna vez te has preguntado cómo es posible que los renos de Papá Noel puedan volar? Bueno, tal vez su consumo de un hongo altamente alucinógeno llamado Amanita muscaria tenga algo que ver. Este hongo es tan poderoso que, en el pasado, en el norte de Europa, algunas personas consumían la orina de los renos para alcanzar un estado de alucinación.

Monos capuchinos

Finalmente, los monos capuchinos prefieren el riesgo y la adrenalina. Se untan la piel con el veneno del mil pies para entrar en un estado de trance. Sin embargo, este veneno contiene cianuro, lo que puede llevarlos a la muerte si entra en contacto con sus orificios corporales. Si te encuentras en la selva o en el desierto australiano y ves a un animal comportándose de manera extraña, no importa lo que pase, no le permitas conducir. Seguramente no estará en condiciones de hacerlo.

Como podemos ver, el comportamiento de los animales al buscar sensaciones distintas a través de sustancias naturales es un fenómeno sorprendente y diverso. La capacidad de estos seres para encontrar y aprovechar las propiedades de ciertas plantas y frutas demuestra una fascinante conexión entre la naturaleza y el mundo animal.