8 Animales Que No Sabías Que Eran Bisexuales

La diversidad sexual en el reino animal

La homosexualidad y la bisexualidad son comportamientos presentes no solo en los seres humanos, sino también en diferentes especies del reino animal. A pesar de los prejuicios y estigmas sociales, la naturaleza no sigue las normas que los seres humanos imponen sobre la sexualidad. A continuación, exploraremos algunos ejemplos de animales que muestran relaciones sexuales y afectivas no heterosexuales.

Ballenas asesinas

Comúnmente conocidas como orcas, las ballenas asesinas pueden ser consideradas poliamorosas, ya que no distinguen entre sexos en términos de estimulación genital. Se ha observado que las orcas estimulan los genitales de su pareja con afecto, sin importar si es del mismo sexo. Además, este comportamiento es recíproco, mostrando amor y cuidado hacia ambos miembros de la pareja de manera equitativa.

Pingüinos de Hanbol

En Perú y Chile, podemos encontrar pingüinos de Hanbol que forman parejas estables durante largos períodos de tiempo, independientemente del sexo. Un caso famoso es el de Roy y Silo, dos machos que fueron pareja durante años en el zoológico de Central Park. Incluso se les dio un huevo para criar, del cual nació Tango, un pingüino heterosexual que más tarde formó pareja con una hembra del zoológico. A partir de este hecho, se han registrado otros casos de parejas de pingüinos del mismo sexo que se ocupan de la crianza de huevos y crías.

Cisnes negros y blancos

Henry, un cisne negro, y Thomas, un cisne blanco, fueron una pareja estable durante 18 años. Se estima que hasta el 25% de los cisnes negros eligen tener una pareja del mismo sexo, y pueden formar parejas duraderas durante décadas. Sin embargo, en el caso de Henry y Thomas, su relación cambió cuando apareció Henrietta, una ganso hembra, con la que Henry se reprodujo. A pesar de esto, Thomas se adaptó y ayudó en la crianza de los hijos de la pareja, formando una relación sentimental entre los tres que resultó en la crianza de 68 gansos en seis años.

Aves como las gaviotas y flamencos

Las gaviotas son conocidas por tener relaciones sexuales entre hembras por necesidad, especialmente cuando no hay disponibilidad de gaviotas masculinas. Un estudio informó que el 14% de las gaviotas en Santa Bárbara eran homosexuales, aunque otro estudio sugirió que el 100% de las gaviotas en Nueva York eran heterosexuales, pero con datos poco precisos. A pesar de esto, se han registrado casos de parejas de gaviotas femeninas que se emparejan durante años, mostrando un compromiso afectivo.

En el caso de los flamencos, también se han documentado parejas del mismo sexo. En la reserva de Slimbridge, en el suroeste de Inglaterra, Carlos y Fernando son dos machos flamencos que tuvieron la oportunidad de criar a un huevo abandonado y luego a una cría, ya que tenían un fuerte deseo de ser padres.

Delfines

Los delfines son conocidos por su comportamiento bisexual entre los machos, aunque no se ha observado lo mismo entre las hembras. Los delfines machos pueden tener relaciones sexuales entre ellos por puro placer, especialmente cuando están esperando el celo de las hembras. Aunque no se ha registrado un comportamiento bisexual en las hembras, la bisexualidad masculina en los delfines es ampliamente documentada.

Macacos japoneses y bonobos

Los macacos japoneses viven en una sociedad matrilineal, donde el linaje se define por la línea materna. Durante el celo, una hembra puede procrear con hasta cuatro machos diferentes. Sin embargo, también se ha observado que las hembras tienen relaciones sexuales entre ellas con mayor frecuencia que con los machos.

Por último, los bonobos, también conocidos como chimpancés pigmeos, son considerados naturalmente bisexuales. Todos los bonobos se consideran bisexuales, ya que no hacen distinciones en sus relaciones sexuales en términos de sexo o edad. Cuando encuentran nuevas fuentes de alimentos, la excitación es tan alta que esto resulta en un acto de sexo en grupo. Los bonobos son famosos por ser una de las pocas especies junto con los humanos que se besan con lengua y tienen relaciones sexuales frente a frente.

La diversidad natural

Estos ejemplos demuestran que la diversidad sexual es inherente a la naturaleza y que las relaciones no heterosexuales son comunes en el reino animal. Son un recordatorio de que la sexualidad va más allá de las normas y expectativas impuestas por la sociedad humana.

Es importante reconocer y respetar la diversidad en todas las formas de vida, incluida la sexualidad de los animales. Al hacerlo, podemos apreciar y comprender mejor la gran variedad de comportamientos que existen en nuestro mundo natural.